Las ventajas competitivas de ser bilingue

Nuestros hijos ya tienen una ventaja competitiva

Cuando me encontraba estudiando en la Universidad en Schenectady NY, una familia me contrató como tutora de español para sus tres hijos, un chico de 17 años, otro de 14 y una pequeña de 7.

El día que los conocí quedé gratamente sorprendida. Estos chicos eran poliglotas, es decir hablaban más de tres idiomas; polaco, alemán, español y por supuesto inglés. Está por demás decir que su español era casi perfecto.

Fue entonces que le pregunte al Papá, cómo es que le había hecho y su respuesta fue simple: “en esta casa mis hijos pueden hablar cualquier idioma excepto inglés, el inglés lo aprenderán afuera sin problema”.

Cabe mencionar que el Padre era de origen Polaco, por lo tanto el únicamente les hablaba en Polaco a los niños y la mamá era Alemana, por lo tanto ella les hablaba únicamente en Alemán y el español lo escogieron por ser el segundo idioma más hablado en el mundo.

A partir de ese día entendí que por el simple hecho de ser Mexicana y hablar español el día que tuviera hijos, les podría dar una ventaja competitiva en el mundo laboral si me aseguraba de que aprendieran español.

Hoy soy madre de tres pequeñas y las tres son bilingües. Pero lograrlo no ha sido nada fácil. Tengo varias amigas hispanas con hijos que no hablan español porque quizá el padre no habla español, porque creemos que es más fácil que nuestros hijos nos entiendan en inglés y porque finalmente vivimos en un País que principalmente es anglófono.

Lo cierto es que mantener nuestro idioma en casa y hacer que nuestros hijos lo aprendan, les traerá grandes beneficios. Por sólo destacar algunos de ellos; hablar otro idioma significa poder ver el mundo de una manera distinta, fomenta la tolerancia con otras culturas, les abrirá puertas en el sector laboral, podrán ser capaces de aprender un tercer idioma más fácilmente si así lo desean, incrementa de manera importante su vocabulario en inglés, y actualmente hay estudios que demuestran que los niños bilingües resuelven los problemas más fácilmente que aquellos que son monolingües y en la escuela obtienen mejores calificaciones en los exámenes.